También vimos la segunda parte de Los Ríos de Color Púrpura, me temía que se me fuera de cartelera sin verla, pero tuve suerte y convencí a Estela de que vieramos esta.
La historia se gira en torno a la aparición de un hombre emparedado en un monasterio en Francia, dos policías se encargan de investigar el caso, cuando empiezan a aparecer más crímenes, hombres asesinados de formas no muy usuales, los asesinatos siempre se ven relacionados con monjes a los que no se les ve la cara (me recuerdan a los Nazgûl de El Señor de Los Anillos), además de que cuentan con habilidades sobrehumanas, estos monjes le dan un toque de misterio y misticismo al caso; ayudados por Marie, una experta en cuestiones religiosas, descubren que los nombres y las profesiones de las víctimas están relacionados con los apóstoles de Jesucristo.
La historia es buena, es un juego policiaco que hace pensar a los espectadores sobre lo que va a pasar y cómo se va a resolver el misterio; las actuaciones son buenas, la ambientación es muy buena.
Vale la pena verla, es una buena película.
La historia es buena, es un juego policiaco que hace pensar a los espectadores sobre lo que va a pasar y cómo se va a resolver el misterio; las actuaciones son buenas, la ambientación es muy buena.
Vale la pena verla, es una buena película.